El legendario guitarrista mexicano Javier Bátiz, conocido como «El padre del rock mexicano», falleció este 14 de diciembre a los 80 años tras enfrentar problemas de salud que incluyeron neumonía y complicaciones relacionadas con niveles elevados de glucosa. Su esposa y representante, Claudia Madrid, confirmó el deceso del músico, quien dejó un legado imborrable en la historia de la música en México.
Un visionario del blues y el rock en México
Nacido en Tijuana, Baja California, el 3 de junio de 1944, Javier Isaac Medina Núñez, conocido artísticamente como Javier Bátiz, fue un pionero que fusionó el blues y el rock and roll en la escena musical mexicana. Desde sus inicios en la banda Los TJ’s en los años 50, Bátiz modernizó el sonido del rock en el país, influenciado por figuras como Chuck Berry y T-Bone Walker. En 1963, se trasladó a la Ciudad de México, donde alcanzó notoriedad al impulsar este género en una época dominada por la música tradicional y romántica.
Maestro de grandes estrellas
Bátiz no solo brilló como músico, sino que también fue mentor de figuras internacionales como Carlos Santana, quien reconoció a Bátiz como una de sus principales influencias. Su impacto trascendió fronteras, siendo también inspiración para artistas nacionales como Alex Lora, Fito de la Parra y otros referentes del rock mexicano. Jim Morrison, líder de The Doors, tuvo contacto con Bátiz y mencionó su conexión con el músico en varias ocasiones.
Una carrera marcada por la innovación
Javier Bátiz grabó discos emblemáticos como Bátiz and Hair y Bátiz Blues Band, consolidándose como una figura fundamental en la historia musical del país. Entre sus composiciones más recordadas destacan Sentimientos tiernos y El vuelo del ángel. Además de su carrera musical, Bátiz fue un ferviente defensor de los derechos de los músicos en México, buscando mayor reconocimiento y condiciones justas para los artistas emergentes.
Legado y tributos
La noticia de su fallecimiento generó una oleada de homenajes en redes sociales, donde fanáticos, músicos y figuras del medio cultural expresaron su pesar y recordaron su inmensa aportación al arte. Claudia Madrid, su esposa, agradeció el apoyo de sus seguidores y destacó el amor con el que siempre trabajó el músico.
La partida de Javier Bátiz deja un vacío en la música, pero su legado continuará inspirando a generaciones futuras que buscan romper barreras con su arte.